Junior 2018 ya está confeccionado, un "nuevo" timonel, refuerzos con estadísticas que los respaldan, sumados a la conservacion de la base del segundo semestre del 2017 son los ingredientes para que arranque la nueva ilusión de toda una hinchada rojiblanca que se expande por la geografia nacional.
Tres frentes tendrá el equipo rojiblanco en el primer semestre: Copa Águila, Copa libertadores y Liga Aguila, cuál de ellos debe ser el objetivo del cuadro tiburón?
La Copa Águila es el menor de todos, y ya Junior en los años recientes ha disputado tres finales de este torneo con un saldo de dos campeonatos y una clasificación a la Copa Libertadores. Es un objetivo ya alcanzado y aunque de cupo a la fase previa de la Libertadores, sin duda alguna no es la prioridad del cuadro currambero. Seguramente este campeonato será utilizado para mantener en ritmo de competencia a los jugadores que menos oportunidades tengan por Liga y Copa Libertadores, así como para probar variantes y ver alternativas en el banco de suplentes.
Por otro lado está el máximo torneo continental: La Copa Libertadores. El torneo, que en esta edición convocó a la mayoría de históricos de Suramérica, con equipos como Boca, River, Independiente, Palmeiras, Cruzeiro, entre otros; estos grandes clubes se han trazado como máximo objetivo ganar el máximo título a nivel de clubes de esta región del mundo. Seamos sinceros, Junior ha traído jugadores de categoría, sin embargo aún creemos para llegar al nivel de los equipos citados anteriormente se necesita recorrer un trecho importante entre conformación de equipo, experiencia, procesos e inversiones, en resumen un torneo de esta índole no se gana de la noche a la mañana, y Junior solo lleva seis meses portándose como un equipo "serio" desde la conformación de su nómina y mejorando algunos aspectos organizacionales, pero con eso aún no alcanza. Ahora bien, los ingresos económicos que brinda el avanzar de fases pueden inclinar la balanza desde el punto de vista dirigencial para prestar especial atención por este torneo, dadas las inversiones realizadas en el fichaje de algunos jugadores rojiblancos que han significado el desembolso de altas sumas de dinero, sin embargo creo que nadie puede exigir o pedir que Junior sea el campeón de la edición 2018 de la Copa Libertadores.
Finalmente tenemos el torneo colombiano de la Liga Águila, la que puede significar la octava estrella. Junior en el ámbito local está obligado a alzarse con este título, ya han sido demasiadas tristezas acumuladas en el camino. Muy a pesar que los demás equipos también se han reforzado de gran manera, Junior sigue manteniendo una de las mejores nóminas del país, que combinada con un técnico, quien en su anterior paso por las toldas rojiblancas llego a instancias finales con menos equipo que el que le acaban de entregar en este 2018, por ende el objetivo a corto plazo es alzarse con el título colombiano y cualquier resultado menor que este puede ser considerado un fracaso, la hinchada no puede pasar por una nueva desilusión, en tres ocasiones anteriores nos hemos ido con las manos vacías, la cuarta tiene que ser la vencida!.
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