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jueves, 13 de junio de 2019

JUNIOR BICAMPEÓN EN BOGOTÁ, CELEBRALO CURRAMBA!



Luego de la tan esquiva octava estrella, se necesitaron solo seis meses para alcanzar la novena, nuevamente de visitante, y nuevamente sufriendo, como solo Junior lo sabe hacer. El estadio Nemesio Camacho “El Campin” nunca fue tan rojiblanco como la noche del 12 de junio de 2019, cuando en masa y desde todos los rincones del país, la hinchada Juniorista se movilizó para acompañar a sus 11 guerreros en la cancha, y luchar juntos por un nuevo campeonato.

El partido fue duro, trabado, con un Junior bien agrupado atrás, esperando contragolpear y defenderse con el balón, mientras un Pasto carente de ideas intentaba pero no podía generar peligro en el arco defendido por Sebastian Viera. Daba la impresión que solo a través de una pelota quieta, ya fuera una falta al borde del área, o un tiro de esquina, iba ser la única manera en que el equipo volcánico podría vulnerar el arco tiburón, pero nadie contaba que a través de un error infantil en la zaga,y a falta de solo 10 minutos para finalizar el partido, Pasto llegaría al empate de la serie para obligar a la definición desde el punto penal, todos los Junioristas nos agarramos la cabeza, fantasmas de pasado rondaron nuestra mentes, no se podia escapar un titulo que parecia tan seguro, pero esto es Junior y ya sabemos lo que significa esto, tanto para bien, como para mal..

Nuevamente se tenía que padecer un viacrucis para ser campeones, un habito confirmado y familiar para el hincha tiburón. Cinco pénales convertidos, incluido el de Rafa Pérez que entró como pidiéndole permiso a las manos del arquero y con un suspenso que paralizó el corazón durante segundos. Fue hasta el último cobro del Pasto, el de Ray Vanegas, que antes de patear estaba mandando callar a Viera, terminaría mandando por las nubes el balon para concretar la gesta y callar todo Pasto, la novena estrella era rojiblanca!.

Fue un campeonato atípico, con muy pocas derrotas, pero con mas empates que victorias, con un volante neto de marca como goleador del equipo, con un cambio de DT justo antes de iniciar los cuadrangulares finales, y sin un goleador neto en la delantera, como quien dice quemando todos los libros que dicen lo que debe hacer un equipo para ser campeón. Pero si alguien debia reescribir canónes no era otro más sino Julio Avelino Comesaña, que en su noveno regreso, logró unir a todos los jugadores y a la aficion, para regalarle la novena estrella a Barranquilla, en su cuarto titulo con Junior, y callando la boca a todos los que llamaron circo a la institución por su vuelta a casa.

Por lo pronto Junior asegura una nueva final de Superliga para el 2020, y su participacion en la Copa Libertadores del proximo año, ojalá se siga apostando en la medida de lo posible por la continuidad del cuerpo tecnico y del equipo, del que por logros y titulos puede ser considerado uno de los mejores de  la historia tiburona, con una base que ha logrado una Copa Colombia, una Superliga, dos Ligas y la final de una Copa Sudamericana.

Luego de años de frustraciones, finalmente llegaron los gozozos. Celébralo curramba, te lo mereces, llego la novena y no es Diciembre, Junior es el actual campeon de Super Liga y bicampeon de Colombia!!!

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